viernes, 18 de diciembre de 2009

Murió mi hermano

Luis Arturo Viña Pardo (Diciembre 10, 1969 - Diciembre 15, 2009)

Se murió mi hermano. No volveremos a jugar a los vaqueros en el inmenso jardín de la abuela. No habrá más matinales. No jugaremos más a ser casanovas en las fiestas de quinceañera ni a ser hombres en los bares de la veinteañez. No habrá más tertulia ni canto ni guitarra. No más serenatas a las novias. No habrá más kilómetros por recorrer en los carros viejos buscando nuevos sueños. No habrá más novenas de aguinaldo con nuestros hijos ni más recorridos en cicla con nuestros gordos cuerpos. No más vida. Se murió mi hermano. Me lo mataron... y con él, nos mataron a todos. Y me mataron a mi. Me mataron mi corazón, mis noches y mis madrugadas, mataron mi canto y mi guitarra y me mataron mi alma que sólo soñará con el reencuentro.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Canción de otoño

Paul Verlaine

Los sollozos más hondos
del violín del otoño
son igual
que una herida en el alma
de congojas extrañas
sin final.

Tembloroso recuerdo
esta huida del tiempo
que se fue.
Evocando el pasado
y los días lejanos
lloraré.

Este viento se lleva
el ayer de tiniebla
que pasó,
una mala borrasca
que levanta hojarasca
como yo.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

El viento, el viento alto

Pessoa... en silencio

El viento, alto en su elemento
Me hace más solo -no me estoy
Lamentando, él se tiene que lamentar.

Es un sonido abstracto, insondable
venido del elusivo fin del mundo.
Profundo es su significado.

Me habla el todo inexistente en él,
Cómo la virtud no es un escudo, y
Cómo la mejor es estar en silencio.

jueves, 3 de diciembre de 2009

Ulises

No soy poeta... al menos bueno, pero hoy me dio por publicar el único escondido entre las carpetas... Perdonen la impertinencia.



La oscuridad inició el viaje
y no sabe de regresos.
Los cantos de sirena callan
ante el silencioso estruendo de la derrota
y en cubierta
abandonados
los sueños agonizan
lejos del campo de batalla.
Penélope hasta ahora entrelaza los primeros hilos.
Ítaca aún no sospecha que tu camino a casa
será el capricho de un poeta
que inventará la leyenda de tus pasos.
Tendido
sin el recuerdo de los cíclopes
respirarás la noche.